Sé que el día que pierda la curiosidad lo he perdido todo.
Inicialmente es la curiosidad la que nos sitúa y muestra el entorno con el que interactuamos.
Ella nos puede llevar muy alto y también muy bajo.
El camino que escojamos nos definirá bastante.
¿Qué hay al otro lado? ¿Qué se oculta tras la nube? ¿Habrá llegado demasiado lejos atrapado por su curiosidad?
No lo sabremos, pero ese momento de haber traspasado la barrera que le impedía
saber qué es lo que había detrás le resulta impagable.